Vestimenta
Los demás animales (no olvidemos que los humanos también somos animales) son utilizados como medios para proporcionarnos pieles y pelo con los que protegernos del frío y vestirnos. Criamos vacas y ovejas, cazamos focas, enjaulamos visones, zorros, etc. impidiendo que estos animales disfruten de sus vidas, y finalmente les matamos para hacer prendas de vestir con sus pieles o con su pelo. Todos los animales (humanos o no) necesitamos protegernos ante las inclemencias del tiempo, pero ello no nos legitima a quitarle la piel a otro para cubrirnos nosotros, ¿o acaso nos gustaría que nos matasen para arrancarnos la piel y hacer con ella unos zapatos?.
El cuero: quitándoles la piel a las vacas
Mientras que la utilización de las pieles proveniente de algunos animales como los visones, los zorros o las chinchillas ha dejado de ser una práctica tan extendida como lo era antes debido a la gran cantidad de información que existe sobre el sufrimiento inherente a esta industria, el cuero es un producto muy demandado y cuya utilización se encuentra muy extendida, siendo principalmente utilizado para la fabricación de calzado, chaquetas, guantes, tapicería (sofás, asientos de coches), etc. Rara vez cuestionamos el hecho de que el cuero también proviene de la piel de un animal, generalmente una vaca (aunque también puede provenir de bueyes, cerdos, caballos..), que ha sido curtida y tratada para evitar su descomposición y conseguir la textura y color deseados. Si el cuero no se rechaza como se hace con otras pieles de animales (visones, chinchillas, etc.) es debido a que habitualmente se considera un subproducto de la industria cárnica. Pero lo cierto es que el cuero tiene poco de subproducto: a las vacas se las explota por su leche, carne y piel, por ello la industria del cuero es un negocio multimillonario que subsistiría aún si las vacas dejaran de asesinarse por su carne o leche y siguiésemos demando únicamente su piel (como ocurre con las pieles de zorros, chinchillas, hurones, etc.)
La piel y el pelo de los demás animales
Para la fabricación de prendas hechas con el pelo o la piel de los animales, a los animales criados y enjaulados para tal fin -o atrapados en su entorno por medio de trampas- se les suele arrancar la piel cuando aun están con vida. Un abrigo supone la muerte de aproximadamente 35 animales no-humanos y para la fabricación de los mismos se matan a unos 30 millones al año aproximadamente. El uso del pelo de animales para vestimenta, es una forma de explotación ampliamente rechazada debido a que es sabido la gran cantidad de sufrimiento y muertes que produce. Pero debemos incidir que los mismos argumentos que nos llevan a rechazar las pieles/pelo, deberían obligarnos a rechazar cualquier prenda de vestir hecha con pieles de animales, ya que en todos los casos han significado la muerte de alguien. Curiosamente el principal argumento utilizado por quienes defienden dicho negocio es que los animales que se crían en granjas con este fin son iguales a los que se crían para el alimento de los humanos, donde las condiciones son iguales e incluso peores, lo que demuestra que una consideración seria por los intereses de los animales pasa por rechazar todos los ámbitos donde éstos son explotados.
La lana: el pelo de los animales
La lana es un producto de origen animal ampliamente consumido y pocas veces cuestionado, a pesar de la gran cantidad de sufrimiento que causa la cría y la explotación de estos animales para la utilización de su lana. La lana es una fibra de proteína llamada queratina, fina, larga y elástica. Antes de su cría para ser explotadas, las ovejas producían suficiente lana para protegerse ellas mismas del frío. Pero las ovejas domésticas de hoy en día han sido seleccionadas genéticamente para que produzcan más lana de lo que seria habitual. Esta selección de ovejas más productivas es causante de múltiples enfermedades derivadas de la excesiva cantidad de pelo, además el esquilado suele ser muy doloroso, a las ovejas se las inmoviliza intentando obtener toda la lana posible de sus cuerpos, ignorando el dolor físico y las heridas que se les causan debido a ello. Las ovejas son individuos con intereses propios, no productoras de bufandas, jerséis, guantes, o abrigos para ir a la moda o protegernos del frío.
Formas de vestir sin productos animales
Son muchas las prendas que hoy en día se hacen sin productos animales. Es fácil la compra de productos como zapatos, abrigos, jerséis etc. hechos de materiales sintéticos como el gore tex, el acrílico, la poliamida, o a base de materias primas vegetales como el algodón, el lino, el cáñamo, etc.
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1 comentario:
Ayss... yo admito que me encanta la lana... aunque la gran parte de mis jerseis son de lana artificial. De todos modos, siempre habia creído que a las ovejas había que esquilarlas porque sino era peor para ellas. El otro día lo hablaba con una amiga cuya familia tiene ovejas y me dijo que había que esquilarlas porque podían morir de calor. Aunque también me dijo que al final, si se la dejabas, terminaba cayéndoles sola...¿?
Por supuesto, eso no es excusa para la industrialización y cría de estos animales sólo para eso. Es como comer carne... los animales están en jaulas, crian continuamente para obtener su leche y sacrificar a las crías apenas nacen... y toda una serie de cosas que más de una vez me han lanzado al veganismo. Es horrible.
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