Madonna fue de las primeras en estrenar la Perrera, el refuxio de Santiago. LLego explotada para la cria, las mamas hasta el suelo y con edad avanzada para aun así, seguir trayendo cachorritos a este mundo.
Poco a poco se ganó el cariño de los voluntarios, Susana, Marta, MIla, Xose, Lorena, Juan.... Paseaba tranquila entre otros animales, le encantaba seguirte moviendo el rabo a ver que chuches traías y si se te habían olvidado o ya no tenías, no le importaba, te regalaba sus besos, aquellos besos cargados de babás a los cuales, solo podías responder con una sonrisa.
La última vez que la vi allí arriba, ya estaba muy mayor. El tipico día que una sube andando a las 4 de la tarde y desfalleces de la calor, sin saldo, sin ganas de gritar. Ella estaba con sus compis fuera y me miró, movío un poco el rabito y vinó hacía mi. Estuve media hora atontada por el tiempo y la caminata pero en todo ese rato, ella estuvo conmigo, a traves de las vallas, regalandome sus cariños mientras movía levemente la cola. Me quedare con ese momento en mi retina princesa. Hoy brillara una estrella más en el cielo y sin duda sera una de las más hermosas y grandes que mis ojos hallan visto jamás.
Madonna, un nombre precioso sin duda para una princesa.
Te quiero preciosa. Loreto
1 comentario:
Preciosa...
Ya corres por ahí arriba sin frío y con júbilo
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