miércoles, 1 de octubre de 2008

Chosquiño

Vino en agosto con su hermano que murió a los pocos días. Los trajo una amiga de una voluntaria. Apenas pesaba medio kilo. Tiene un ojito mal desde que llegó. No es recuperable pero puede hacer vida normal perfectamente. Ahora tiene unos tres meses. La gente que viene al refugio no se fija en él por culpa de su ojo, que es cierto, da un poquito de grima, pero él es tan cariñoso que nos hace olvidar este “defectillo”. Ojala encontremos a alguien que lo adopte cuanto antes, mientras sea todavía cachorrito, porque bien se sabe que de adulto, sus posibilidades de ser adoptado son muy reducidas.
"Las imperfeciones son las que nos hacen especiales"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ésta página hace una labor maravillosa.Yo que tengo cierta sensibilidad con los animales, el verlos así malitos y los pobres solos y abandonados (por su puesto antes de tener la suerte de caer en vuestras manos)me hace sentir fatal.Me encantaría verlos a todos bien, con sus dueños que los quieren y cuidan. Ojalá pronto este gatito sea feliz con un dueño que la quiera.Y ojalá este mundo sea más consecuente con lo que hace y si tienen animalitos es para tratarlos como se lo merecen, dignamente... porque como bien dice ese anuncio tan famoso...Ellos No Lo Harían...y yo sé que no, porque son los más fieles del mundo. Saludos!!

Anónimo dijo...

A mi gata Perla también le falta un ojito, y doy fé de que hace una vida perfectamente normal, no es en absoluto un problema, y es la más bonita del mundo. Espero que se de pronto en adopción y que la gente con dos ojos sepa apreciar su belleza.